Iniciamos una nueva gestión administrativa y eso es motivo de renovado entusiasmo. Agradezco al Dr. Vallarta la designación que ha hecho para que me desempeñe como Secretario General. Estoy para servirle y para servirles para hacer de la AMCPER la Asociación que todos sus miembros quieren. La unidad de la AMCPER no es una moda, el fin en sí mismo, no es uniformidad, no es el silenciamiento de quienes quieren opinar, no es mera conveniencia y no es simulación.
La unidad de la AMCPER, una asociación de pares libres, se funda, además, en la coincidencia de sus miembros, en los principios de su historia, misión, visión y valores, cuyo eje es la dignidad del cirujano y la cirugía plástica; en los valores morales que animan su conducta, tales como el desarrollo profesional continuo, el trabajo y en las metas de una cirugía plástica segura.
Esta unidad es esencia, cuya solidez presupone y asimila una gran diversidad de opiniones en los muy diversos temas del quehacer de la Asociación. Si se tratare de una moda, pronto quedará evidenciado y sería un engaño y tiempo perdido. Esa pluralidad de opiniones puede y debe expresarse solo en el marco de nuestros principios y valores.
La unidad de la AMCPER no es un fin en sí misma, sino una plataforma de lanzamiento de nuestra acción y trabajo. La unidad de la AMCPER es prerrequisito para el éxito de nuestra gestión y para la eficacia de nuestro desempeño.
La unidad entre los miembros de la AMCPER debe ser el resultado de una cultura compartida, y la cultura compartida entre los cirujanos plásticos, hoy es imprescindible, es un bien que debe ser cuidado y protegido.
En la AMCPER todos somos responsables de cultivar la unidad. El liderazgo del Dr. Vallarta es muy importante, tal como lo muestró en su momento, la aceptación de su candidatura de unión; pero, no cabe duda de que la unidad de la AMCPER está confiada al honor de todos y cada uno de sus miembros.
órdenes da, sino aquel que sabe hacerse acompañar por los que comparten los mismos ideales, “para que al final de cada jornada exitosa puedan exclamar: ¡Lo hicimos entre todos!” Por eso la unidad de la AMCPER no se construye sola: es tarea ardua, generosidad compartida, misión personalísima de todas y todos los que estaremos al frente encabezados por el presidente de la AMCPER y para que los socios confíen en nosotros.
La unidad se fortalece cuando se respetan las todas las opiniones que, cuando son expresadas por las vías adecuadas, contribuyen al perfeccionamiento del conjunto y fortalecen a la institución. La unidad de la AMCPER requiere, pues, de un renovado compromiso de todos sus miembros; la unidad no se construye mediante artificios políticos ni mediante estériles discusiones, sino con la fuerza de nuestra congruencia con los principios y la ética, con la vigencia de nuestro estatuto y con el ejercicio responsable y acciones concretas.
La unidad se teje todos los días, por lo que es una quimera pretender una aceleración unionista que por necesidad sería superficial y ficticia. La unidad es siempre un proceso perfectible, nunca es un hecho definitivamente consumado.
El estar hoy nosotros aquí obedece, afortunadamente, a la convicción profunda que tenemos de que servir a la AMCPER es antes que nada, la disposición y capacidad de dar. Trabajemos pues, para que la AMCPER y la cirugía plástica mexicana sigan siempre el mejor camino, el camino de vanguardia.
AMCPER.…¡ESTAMOS JUNTOS!
Dr. J Eduardo Gutiérrez Salgado
SECRETARIO GENERAL
